Cómo de Ripley catalogan varios abogados de la Península el
caso de Ruth Guale, una joven nativa de
la parroquia Manglaralto, localidad situada
al norte de la península quien está acusada de presunto peculado por la
Contraloría General del Estado.
Ruth Guale se desempeñaba como recaudadora del Cuerpo de
Bomberos de Manglaralto, pero un informe
de contraloría correspondiente al año fiscal 2015 estableció un faltante de $
35
En septiembre del 2016 se notificó a Ruth del faltante y la funcionaria
de inmediato realizó el depósito muy a pesar que no era su culpa porque el día
en que se habría dado el supuesto perjuicio ella no estaba trabajando y se comprobó
que fue su remplazo que no efectúo la transacción bancaria que debe hacerse
todos los días con dineros del estado.
En febrero del 2017 la chica se enteró que había sido enjuiciada por peculado y tuvo que
abandonar su cargo administrativo de la entidad donde laboró desde el 2009, sus
compañeros al enterarse de la situación que atravesaba Guale optaron por
dejarle como miembro de la tropa y ahora acude a los llamados de emergencia.
El jurisconsulto Juan Pazmiño, defensor de Guale, dijo que
este es un caso para ripley “hemos pedido la nulidad del proceso, están todas
las pruebas presentadas que la chica no es culpable, causa sonrisa que por 35
dólares se le pretenda llevar a la cárcel”, indicó el abogado.
Los juristas presentes en el Ministerio Público de la
Península con sonrisa comentaban el hecho “pobre chica, por ser una comunera le
quieren culpar de un peculado, mientras otros funcionarios de grandes elites
que comenten faltas de grandes sumas de
dinero andan muy tranquilos”, decían.
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